El precio del crudo del tipo de referencia West Texas Intermediate (WTI) experimentó un nuevo retroceso en la Bolsa de Nueva York (Nymex), por debajo de los 80 dólares, el valor más bajo desde junio 2012, una señal más de lo que se cree es ya una guerra de precios lanzada por exportadores como Arabia Saudita contra productores estadounidenses.
En la industria petrolera ya se viene alertando sobre una caída progresiva de los precios por el exceso de oferta de los productores y la reducción en la demanda de Europa y China, hecho que se discutirá en la reunión extraordinaria convocada por los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo a finales de noviembre en Viena.
De acuerdo con medios financieros, el descenso de hoy se debe a que Arabia Saudí decidió bajar aún más, y por cuatro mes consecutivo, el precio del petróleo que suministra a Estados Unidos, mientras subió el valor del barril que entrega a otros lugares, entre ellos Asia. La decisión obedece a los intentos de Arabia Saudita, el primer exportador mundial de crudo, de intentar contrarrestar la cada día más creciente de producción de petróleo "shale" en Estados Unidos, que está reduciendo la dependencia energética de este país.
Según datos oficiales de la Administración de Información de Energía de Estados Unidos, el país norteamericano importó 27,7 millones de barriles de petróleo crudo de Arabia Saudita en agosto, el nivel más bajo desde febrero 2010. Para el director de la división de futuros la firma Mizuho Securities US, Bob Yawger, esto "sin duda atraerá a algunas compañías de refinado del Golfo de México", en declaraciones recogidas por The Wall Street Journal.
Al igual que el petróleo de Texas, el barril de crudo Brent, de referencia en Europa y en los mercados globales, cerró hoy con un descenso del 1,25 %, hasta terminar con un valor de 84,78 dólares.