La estrategia de Arabia Saudita empieza a dar resultados, sostiene un informe de la publicación especializada Platts.
El reporte revisado de la OPEP correspondiente a 2014 mostraba un recorte de 330.000 b/d, sin embargo el grupo de países estima que las cifras en realidad mostrarán un aumento de 120.000 b/d.
Para 2015, las expectativas son favorables ya que la OPEP espera incrementar su oferta en 430.000 b/d, como consecuencia directa de la caída de producción de países fuera de la organización, que reducirán su producción en 400.000 b/d en promedio.
Las expectativas se consumo se mantienen en torno a los 92,3 barriles diarios, una cifra levemente más alta que en 2014.
La revisión trimestral eleva las perspectivas de oferta de la OPEP por encima de los 30 millones de barriles diarios, hasta 30,1 millones después de junio y a 30,64 millones para el último trimestre de 2015.
Como contrapartida, la producción de los países por fuera del cartel petrolero se reducirá en 510.000 barriles diarios en el tercer trimestre y en 670.000 para el último cuarto. Estas perspectivas parecen darle la razón a la postura de Arabia Saudita, quien dominó la última reunión de la OPEP en Viena donde se decidió mantener la producción de crudo.
La caída de precios afecta más severamente a otros exportadores de crudo, fundamentalmente a la creciente producción de EEUU.
Grandes petroleras se han visto obligadas a anunciar fuertes recortes de capital y a suspender la perforación de nuevos pozos ante la baja de las cotizaciones.