El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, oficialmente vetó la ley que permitía la construcción del polémico oleoducto Keystone XL para el transporte de crudo desde Canadá hasta el Golfo de México.
Obama ya había anunciado que posiblemente vetaría el proyecto que había logrado la aprobación de ambas cámaras después de seis años. Por su parte, representantes del Senado acordaron que votarán para anular el veto en la próxima semana.
El presidente había dicho que esperaría al estudio del Departamento de Estado sobre el proyecto de TransCanada antes de tomar una decisión acerca de la construcción del oleoducto de 8 mil millones de dólares.
“Por medio de este proyecto de ley, el Congreso de Estados Unidos intentó sortear los reconocidos procesos que determinan si la construcción y operación de un ducto son de interés nacional”, indicaba el texto del veto.
El sitio World oil indicó que el secretario de prensa de la Casa Blanca, Josh Earnest, aseguró que el veto de Obama era estrictamente debido a la legislación y no por el proyecto en sí. Es “posible” que Obama eventualmente apruebe el oleoducto una vez que el Departamento de Estado finalice su investigación.
“El presidente mantendrá una mente abierta”, dijo Earnest.
A la hora de aprobar el proyecto de ley, ambas cámaras fallaron en obtener la cantidad de votos positivos necesaria para evitar el veto del presidente.