Venezuela inició nuevas gestiones diplomáticas para conseguir una reunión de emergencia de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), según anunció el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.
El mandatario venezolano, que el año pasado hizo una gira entre países aliados de la OPEP sin conseguir organizar un encuentro más allá de la reunión ordinaria del grupo, dijo que buscará también el apoyo de Rusia en esta nueva búsqueda de consenso con la que apuntalar los precios del crudo.
"Estamos trabajando para una reunión especial de la OPEP, que anunciaremos en los próximos días (...) Estamos haciendo contacto con los gobiernos", dijo Maduro durante su programa semanal en televisión.
"Estamos evaluando la posibilidad de que se convoque al más alto nivel de la OPEP y en coordinación con la Federación de Rusia y el presidente Vladimir Putin, podamos avanzar en la toma de un conjunto de acciones para defender el mercado petrolero frente a este nueva caída", agregó, sin dar más detalles.
Junto con Venezuela, Argelia también ha expresado su preocupación en los últimos días por el descenso de los precios del crudo, pero hasta ahora el resto de los miembros del grupo no se han mostrado a favor de sostener un encuentro de emergencia ni apoyan un posible recorte de la producción.
Los países de la OPEP no tienen planes para discutir en una reunión de emergencia la caída de los precios internacionales del crudo antes de la próxima cita programada para diciembre, dijeron dos delegados de la organización.
El presidente venezolano admitió lo difícil que ha sido maniobrar esta caída de los precios del crudo, la fuente de nueve de cada 10 dólares que ingresan a la economía de la nación sudamericana, afectada por una alta inflación y una escasez de bienes básicos, y que tiene al frente unas elecciones parlamentarias a fines de año.
Maduro reiteró en su programa semanal que Venezuela "continuará recibiendo recursos" de sus aliados ideológicos como China y otros países de América Latina.