Algunos miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo en el Golfo Pérsico están preocupados por la más reciente caída en los precios del crudo, aunque ven pocas posibilidades de que el grupo exportador se desvíe de su política de defender la cuota de mercado, indicaron algunos delegados del cártel.
El Brent se está negociando en casi 46 dólares por barril, cerca de su menor nivel en el 2015 tras una caída de 18 por ciento en julio, presionado por abundantes suministros y preocupaciones sobre la economía china, el segundo consumidor mundial de crudo.
Pese a esto, los delegados que incluyen a miembros de la OPEP en el Golfo Pérsico que declinaron ser identificados dijeron que China todavía está comprando y almacenando crudo y esperan que el fuerte crecimiento de la demanda global impulse los precios de nuevo a los 60 dólares por barril el próximo año.
"Existe una preocupación sobre la salud de la economía china, pero como han mostrado las cifras la necesidad de importar petróleo está aumentando", dijo un delegado de la OPEP en un productor del Golfo Pérsico.
"Los precios del petróleo seguirán volátiles (...) pero se recuperarán", dijo el delegado este mes, al agregar que no espera que la OPEP tome alguna decisión ahora "debido a la falta de claridad" en el mercado.
Los miembros de la OPEP en el Golfo Pérsico, relativamente acaudalados, están en mejores condiciones para lidiar con los bajos precios del crudo que Irán, Venezuela o los miembros del grupo en África.
Liderados por Arabia Saudita, los miembros del Golfo Pérsico impulsaron un cambio en la estrategia de la OPEP el año pasado para permitir que los precios caigan a fin de desalentar el crecimiento en fuentes competitivas de suministros.