La industria petrolera estadounidense produjo menos crudo del inicialmente estimado este año, según un nuevo dato del Gobierno que ofreció la visión más clara hasta el momento de uno de los temas de mayor importancia para el mercado mundial.
En un documento publicado en su página de internet, antes de la divulgación formal de nuevas cifras, la Administración de Información de Energía (EIA, por su sigla en inglés), dijo que según sus nuevos datos Estados Unidos produjo 9,3 millones de barriles por día en junio, una baja de 100.000 barriles por día desde una estimación revisada en mayo.
El nuevo dato está basado en un sondeo mensual más amplio sobre operadores que incluye por primera vez petróleo crudo e hidrocarburos líquidos ligeros.
Hasta ahora, los reportes se basaban en datos individuales de cada estado, que a menudo eran incompletos o con retrasos de hasta un mes, junto con algunas cifras de terceros.
La EIA aseguró que redujo su dato mensual previamente informado para enero hasta mayo en 40.000 barriles por día a 130.000 barriles por día, sin dar cifras específicas para cada mes.
La cifra previa publicada hasta mayo, basada en la metodología antigua, mostró que la producción en Estados Unidos alcanzó un máximo en marzo a 9,693 millones de barriles por día, el mayor nivel desde 1971 y un aumento de 1,4 millones de barriles por día frente al año previo, antes de caer a 9,511 millones de barriles por día en mayo.
Las nuevas cifras arrojan luz sobre un exceso de oferta mundial de petróleo, aunque no parecen haber cambiado la trayectoria general de los suministros estadounidenses, que se cree que alcanzaron un máximo en la primavera boreal.