La OPEP proyectó una mayor demanda de su petróleo para el próximo año, y mantiene la perspectiva de que su estrategia de dejar que los precios caigan limitará los suministros de Estados Unidos y de otros productores rivales.
En un reporte mensual, la Organización de Países Exportadores de Petróleo redujo, no obstante, su estimación para el crecimiento de la demanda global de petróleo en el 2016 y predijo una desaceleración en el suministro de los países que no integran el grupo, aunque no tan drástica como la estimada por la Agencia Internacional de Energía.
La OPEP dijo que espera que la demanda de su crudo promedie el próximo año 30,31 millones de barriles por día (bpd), un alza de 190.000 bpd respecto de su informe anterior, pese a un menor crecimiento de la demanda debido a perspectivas más débiles para Latinoamérica y China.
La OPEP se ha negado a reducir el bombeo, y busca recuperar cuota de mercado al desacelerar la elevada producción en Estados Unidos y en otros países que fueron alentados por la antigua política de la OPEP de mantener los precios cerca a 100 dólares. "Pese al moderado crecimiento económico, datos recientes mostraron una demanda de crudo mejor a la esperada en los principales países consumidores", dijo el cártel.
"Al mismo tiempo, la producción de crudo de Estados Unidos ha mostrado señales de desaceleración. Esto podría contribuir a una reducción en el desequilibrio de los fundamentos del mercado petrolero, no obstante, aún está por verse a qué nivel se puede alcanzar esto en los próximos meses", agregó.