El presidente de Guyana, David Granger, dijo que Venezuela inició un "despliegue militar extraordinario" en una zona cercana a un área en disputa, pocos meses después de que un descubrimiento de petróleo reanimara el centenario conflicto.
La disputa entre los vecinos revivió después de que la estadounidense Exxon Mobil inició este año la explotación de un yacimiento de crudo frente a la costa de Guyana, que Caracas dice está en una zona en controversia.
"Hemos notado durante el mes de septiembre una escalada extraordinaria de la actividad militar de Venezuela en el este de Venezuela", dijo Granger, elegido este año como presidente de la pequeña nación de habla inglesa, en su oficina de Georgetown.
"Persiste la conducta agresiva, el comportamiento hostil hacia Guyana", afirmó el mandatario. Agregó, sin detallar, que el despliegue era principalmente de componentes de la marina y de fuerzas terrestres.
Por su parte, el ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino, informó a través de su cuenta en Twitter que sus Fuerzas Armadas realizaban "ejercicios militares en todo el territorio", sin referirse específicamente a la frontera.
"Llamo al pueblo de Venezuela a que permanezca tranquilo porque estamos realmente preparándonos", dijo en otro mensaje en la televisora estatal.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha dicho que Granger es un "rehén de Exxon Mobil".
Guyana, un pequeño país habitado por 800.000 personas ubicado entre Venezuela, Brasil y Surinam, ha depositado sus esperanzas en el reciente descubrimiento petrolero y no ha aceptado la petición de Venezuela de detener los trabajos en la zona.
Granger anunció el lunes que peleará por ese territorio ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya, al tiempo que criticó el proceso de mediación de Naciones Unidas (ONU).
El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, ofreció su mediación para resolver el prolongado diferendo limítrofe entre ambas naciones sudamericanas.