La caída de los precios internacionales del crudo ha afectado a las petroleras del país y, como consecuencia, despertado el interés de la actividad petrolera por el gas de la Cuenca Neuquina.
La producción de gas del mes de agosto alcanzó un nuevo incremento interanual, y se perfila junto con el shale como el predilecto de los no convencionales en la Argentina.
En los últimos meses, los yacimientos como Los Molles, Lajas, Sierras Blancas-Tordillo y Basamento han comenzado a tener más presencia y buscan echar sombra a la formación neuquina Vaca Muerta.
La comparación de costos entre el shale y el tight gas han atraído la atención de las petroleras, ya que una perforación de 2.500 metros de profundidad en Vaca Muerta podría costar al menos 15 millones de dólares. Mientras que en el caso del gas, la búsqueda en yacimientos como Lajas implica mayor profundidad, pero menores costos y mayor productividad de los pozos, indicó el diario de Río Negro.
Por su parte, las principales petroleras que operan en el país, como la estatal YPF, Pan American Energy (PAE) y la francesa Total, han realizado fuertes inversiones en el gas durante el último año.
Tal es el caso de la petrolera estatal, que anunció en el mes de junio que invertirá alrededor de 612 millones de dólares para incrementar la producción de gas no convencional en Neuquén.
Otro ejemplo es el acuerdo firmado entre PAE y Gas y Petróleo de Neuquén a fines de julio para realizar trabajos de exploración en Aguada Cánepa, con el fin de hallar reservas de tight gas.