Los precios del petróleo cayeron casi un 4 por ciento, acelerando un desplome que amenaza con llevar al barril a mínimos de seis años y medio, debido a que los operadores están preocupados por un persistente aumento de los inventarios en Estados Unidos y por pronósticos pesimistas para el próximo año.
El valor del Brent cayó bajo los 45 dólares por barril por primera vez desde agosto, su sexto declive en siete sesiones que ha generado una merma de un 12 por ciento. El más reciente descenso fue provocado por datos que mostraron que los inventarios de crudo en Estados Unidos subieron por séptima semana consecutiva. Las existencias aumentaron en 4,2 millones de barriles la semana pasada, frente a expectativas de analistas de un alza de 1 millón de barriles.
En su reporte mensual, la Organización de Países Exportadores de Petróleo dijo que su producción cayó en octubre, pero que a los niveles actuales de bombeo aún podría generar un superávit diario de más de 500.000 barriles por día para el próximo año.
Los futuros del referencial Brent cayeron un 3,8 por ciento a 44,06 dólares por barril. El desplome de la última semana ha dejado al Brent a menos de dos dólares de sus mínimos de agosto y de su cotización más baja en seis años y medio. Mientras que los futuros del West Texas Intermediate (WTI) perdieron un 2,8 por ciento a 41,75 dólares por barril. Su mínimo de agosto fue de 37,75 dólares.