El ministro de Petróleo de Arabia Saudita, Ali Al-Naimi, descartó un recorte a la producción de crudo y pidió a ejecutivos de empresas de energía que "se mantengan unidos" ante el peor desplome de la industria en décadas, al expresar su confianza en que el apoyo a los esfuerzos por congelar el bombeo reducirá la excesiva oferta global.
El ministro indicó durante su exposición en la conferencia de IHS CERAWeek en Houston que esperaba que "la mayoría de países" firmen el pacto provisional de suministros, posiblemente en un encuentro en marzo.
El acuerdo, anunciado tras una inesperada reunión entre Arabia Saudita, Rusia, Venezuela y Qatar hace una semana, es "el inicio de un proceso", sostuvo, reiterando los comentarios de otros funcionarios en el Golfo Pérsico la semana pasada.
Pero advirtió en contra de las expectativas de que un acuerdo podría llevar a una reducción de la producción, que alcanzó niveles récord en algunos países el mes pasado. No se refirió específicamente a Irán, el principal obstáculo para que se concrete un pacto global al haber optado por elevar su producción tras la eliminación de las sanciones internacionales.
"Estoy seguro que el congelamiento le dará cierta esperanza a las personas en el mercado, de que algo va a suceder y sucederá- pero no estamos contando con recortes debido a que hay menor confianza", manifestó.
Aunque el discurso marca sus comentarios públicos más extensos en meses, Al-Naimi ofreció poca información sobre la condición de los mercados petroleros o la evolución de la creación de políticas en Arabia Saudita, el mayor exportador mundial.
En cambio, buscó hallar una causa común en una industria que ha tenido problemas para aceptar la abrupta decisión de Riad de defender su cuota de mercado y no reducir la producción para impulsar los precios, como lo ha hecho por décadas. Los precios del crudo ha caído 70 por ciento desde mediados del 2014.
"No hemos declarado la guerra al shale o a ningún país o empresa determinada, contrario a todos los rumores", afirmó Al-Naimi, la autoridad petrolera más influyente del mundo, en su discurso.
"Estamos haciendo lo que cualquier otro representante de la industria en está habitación está haciendo. Responder a las condiciones de mercado desafiantes y buscando la mejor solución posible en un entorno altamente competitivo", dijo, al agregar que los nuevos suministros de crudo son bienvenidos, incluyendo los de esquisto.
Naimi también reiteró su posición de que Arabia Saudita está lista para satisfacer la demanda de sus clientes, para mantener un colchón de capacidad de producción adicional y que sigue dispuesta a actuar junto con otros productores para crear un mercado petrolero estable.