La producción petrolera rusa se situó en 11,34 millones de barriles por día en febrero, una baja de unos 75.000 desde el nivel de octubre que es la línea de base para un acuerdo global, pero no cumplió con la meta fijada, según datos del Ministerio de Energía.
La cifra se compara con los 11,38 millones de barriles diarios en enero. En toneladas, la producción de petróleo alcanzó 43,303 millones frente a los 48,113 millones de enero.
Todas las grandes petroleras rusas redujeron su actividad. Lukoil, la principal firma del rubro del país y Rosneft, la número dos de Rusia, bajaron su actividad en un 0,6 por ciento y un 0,5 por ciento mensual, respectivamente.
La producción en Gazprom Neft, el brazo petrolero de Gazprom, cayó un 1,9 por ciento el mes pasado.
Las exportaciones de oleoductos sumaron 4,480 millones de barriles por día en febrero, frente a los 4,313 millones de barriles diarios en enero.
La Organización de Países Exportadores de Petróleo y otros grandes productores liderados por Rusia acordaron reducir su producción combinada de petróleo en 1,2 millones de barriles diarios a partir del 1 de enero para equilibrar el mercado.
De eso, Rusia se comprometió a recortar 228.000 barriles de crudo por día a partir de octubre de 2018, la línea de base para el acuerdo, cuando la producción del país sumó 11,41 millones.
