Estados Unidos volvió a imponer sanciones a Irán después de retirarse de un acuerdo nuclear de 2015 entre Teherán y seis potencias mundiales. Con la meta de reducir a cero las ventas de Irán, Washington terminó las exenciones que había concedido a los compradores de crudo iraní.
Sin embargo, Irán despachó cerca de 300.000 barriles diarios de crudo en junio, según dos fuentes de la industria. Datos de Refinitiv Eikon ubican los envíos de crudo en aproximadamente 240.000 barriles por día. "Es un nivel muy bajo de exportaciones de crudo real", dijo una de las fuentes.
La reducción de las exportaciones de Irán, miembro de la Organización de Países Exportadores de Petróleo, es un factor clave para el grupo de productores y sus aliados, que se reúnen el 1 y 2 de julio para decidir si bombearán más petróleo en el resto de 2019.
Los envíos de Irán en junio se comparan con los 400.000 a 500.000 barriles diarios de mayo según lo estimado por las fuentes de la industria y Refinitiv. El país exportó más de 2,5 millones de barriles en abril de 2018, el mes antes de que el presidente Donald Trump retirara a su país del acuerdo nuclear.
Teherán ya no informa sus cifras de producción a la OPEP y no hay datos definitivos sobre las exportaciones, ya que puede ser difícil saber si un barco ha llegado a un usuario final específico.
Los datos de Eikon de Refinitiv mostraron que Irán despachó 5,7 millones de barriles de crudo en los primeros 24 días de junio a Emiratos Árabes Unidos, Turquía, Singapur y Siria, aunque estos pueden no ser los destinos finales.