Goldman Sachs redujo su pronóstico sobre el crecimiento de la producción de hidrocarburos no convencionales de Estados Unidos en 2020 y disminuyó ligeramente su estimación en torno al aumento de la demanda mundial de petróleo.
La correduría dijo que ahora prevé que la producción de petróleo de esquisto suba en 700.000 barriles por día 2020, una baja respecto de la estimación anterior de un alza de 1 millón, e inferior al avance de 1,1 millones de 2019.
Goldman Sachs redujo, además, su panorama de crecimiento de la demanda global de crudo a 1,3 millones de barriles diarios en 2020, desde la previsión anterior de un alza de 1,4 millones.
También indicó que espera un crecimiento de los suministros de los principales países productores que no pertenecen a la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), sin incluir el esquisto, de 1,4 millones de barriles diarios en 2020, una cifra que caería abruptamente a 200.000 en 2021 y de 300.000 en 2022.
El cártel petrolero, Rusia y otros grandes productores, una alianza conocida como OPEP+, han implementado desde enero un acuerdo para recortar los suministros de crudo en 1,2 millones de barriles por día para elevar los precios en el mercado internacional.