Los precios del petróleo se estabilizaron, pero se encaminaban a una segunda semana de pérdidas, mientras el mercado esperaba nuevas señales de recuperación de la demanda de combustible en China y el impacto de un embargo y un tope de precios de la Unión Europea a los productos petrolíferos rusos.
Los futuros del crudo Brent caían 18 centavos, o un 0,2%, a 81,99 dólares el barril hacia las 1043 GMT, tras haber bajado cerca de un 1% en la sesión anterior. Los futuros del crudo estadounidense West Texas Intermediate (WTI) retrocedían 14 centavos, o un 0,2%, hasta los 75,74 dólares.
El crudo Brent está a punto de registrar un descenso superior al 5% esta semana, mientras que el WTI se encamina a una caída del 4%.
Un dólar ligeramente más fuerte antes de la publicación de los datos de empleo en Estados Unidos frenó las ganancias. Una divisa estadounidense más fuerte puede frenar la demanda de petróleo, ya que suele encarecer la materia prima en dólares para los tenedores de otras monedas.
Es probable que el crecimiento del empleo en Estados Unidos en enero se haya mantenido fuerte gracias a la resistencia del mercado laboral, pero las expectativas de una continua ralentización de las ganancias salariales ofrecen a la Reserva Federal cierta tranquilidad en su lucha contra la inflación, según mostró un sondeo de Reuters.
El banco central estadounidense redujo la subida de tasas a una más suave que las del año pasado, pero los responsables políticos también previeron que serían necesarios "continuos aumentos" de los costes de endeudamiento.
Los inversores también están atentos a la evolución de la prohibición impuesta por la Unión Europea a los productos refinados rusos el 5 de febrero, y los países de la UE intentan llegar a un acuerdo el viernes para fijar topes de precios para los productos petroleros rusos.
El Kremlin afirmó que el embargo de la UE a los productos refinados del petróleo ruso desequilibraría aún más los mercados energéticos mundiales.