El suministro de crudo ruso aumentó un 50% esta primavera boreal a pesar de las sanciones impuestas por los países del G7 debido a la guerra en Ucrania, informó el Financial Times citando datos de la empresa de análisis Kpler.
La Unión Europea, los países del G7 y Australia introdujeron el pasado diciembre un tope de 60 dólares por barril sobre el petróleo ruso, con el objetivo de frenar la capacidad de Rusia para financiar el conflicto en Ucrania.
Sin embargo, es probable que los ingresos petroleros rusos aumenten debido a las constantes subidas de los precios del crudo y a la reducción del descuento sobre su propio petróleo, señala el informe del FT, citando estimaciones de la Escuela de Economía de Kiev (KSE).
Casi tres cuartas partes de todos los flujos marítimos de crudo ruso viajaron sin seguro occidental en agosto, según un análisis de los registros de transporte y seguros realizado por el Financial Times.
Rusia redujo sus exportaciones marítimas de diésel y gasoil en casi un 30%, a 1,7 millones de toneladas métricas, en los primeros 20 días de septiembre respecto al mismo periodo de agosto. Se esperaba que la prohibición temporal de Rusia de exportar gasolina y diésel a la mayoría de los países, anunciada la semana pasada, redujera aún más el suministro.