La gigante petrolera BP reportó su mayor pérdida anual en al menos 20 años en el 2015 y anunció que serán eliminados miles de empleos, un revés para la compañía británica en momentos en debe afrontar la crisis generada por el derrumbe de los precios del crudo.
La compañía, que aún está asumiendo los enormes costos del mortal derrame de petróleo del 2010 en el Golfo de México, dijo que eliminaría un total de 7.000 empleos hacia el 2017, casi un 9 por ciento de su fuerza laboral, como parte de un programa de reestructuración de 2.500 millones de dólares anunciado el año pasado.
La petrolera británica reportó una pérdida anual de 6.500 millones de dólares en el 2015, aún peor que sus resultados del 2010, cuando debió asumir los costos por multas y demandas civiles del derrame de petróleo que ascendieron a alrededor de 55.000 millones de dólares.
Las ganancias del cuarto trimestre por costo de reemplazo subyacente, la definición de BP de utilidades netas, fueron de 196 millones de dólares, muy por debajo de las expectativas de los analistas de 730 millones de dólares.
BP es una de las últimas compañías del sector de energía en reportar sus resultados del cuarto trimestre. Chevron, el segundo mayor productor de crudo de Estados Unidos, informó la semana pasada sobre su primera pérdida trimestral en más de 13 años.
Los precios del referencial Brent promediaron 43 dólares el barril durante el cuarto trimestre del 2015, una baja respecto a los 76 dólares de un año atrás. La peor crisis de la industria en tres décadas no ha dado señales de atenuarse, y el precio del crudo Brent ha promediado alrededor de 33 dólares por barril en lo que va del 2016.
"La compañía (BP) necesitará centrarse en los costos básicos y gastos de capital a fin de retornar a la rentabilidad, y el aumento de la deuda neta es de preocupación en las actuales circunstancias", dijeron analistas de Cenkos Securities.