El gigante petrolero Saudi Aramco hizo públicos por primera vez sus resultados anuales y anunció una disminución del 20,6 por ciento de sus beneficios netos en 2019, provocada por la caída de los precios del petróleo.
En 2019 la compañía tuvo un beneficio neto de 88.200 millones de dólares, frente a los 111.100 millones de 2018, indicó un comunicado publicado en la web de la bolsa saudita.
"La caída se debe principalmente a la caída de los precios del petróleo bruto y de los volúmenes de producción", dijo la petrolera, la mayor compañía cotizada en bolsa del mundo.
"2019 fue un año excepcional para Saudi Aramco. En distintas circunstancias –algunas planificadas y otras no– el mundo pudo ver una muestra sin precedentes de la agilidad y la resiliencia de Saudi Aramco", declaró el presidente de la compañía, Amin Nasser, citado en un comunicado.
"Nuestra escala única, nuestros costos reducidos y nuestra resiliencia se unieron para generar a la vez el crecimiento y los beneficios más importantes del mundo, manteniendo al mismo tiempo nuestra posición como una de las compañías energéticas más fiables del planeta", añadió.
El anuncio de los resultados anuales de Saudi Aramco llega en un contexto de tensiones en el mercado petrolero por la epidemia de nuevo coronavirus y por una guerra de precios entre Arabia Saudita y Rusia.
Riad está presionando a Moscú, segundo productor mundial de petróleo, para que acepte una reducción de la producción global para compensar la caída de la demanda, frenada por la pandemia de coronavirus.
En abril de 2019 Aramco permitió por primera vez el acceso a sus cuentas pero solo para las agencias de calificación financiera. La empresa pública anunció entones un beneficio neto de más de 111.000 millones de dólares en 2018.
La compañía está obligada a ser más transparente tras su histórica salida a bolsa, el 11 de diciembre de 2019.