Los referentes de las principales petroleras que operan en Vaca Muerta expresaron su expectativa de que el próximo gobierno avance hacia un nuevo paradigma de exportación de los recursos, lo que implica respetar la referencia internacional de precios, sostener la previsibilidad regulatoria e impulsar la competitividad con mecanismos fiscales.
Así lo plantearon casi al unísono los participantes del primer Energy Oil Gas Summit, organizado por la Revista Forbes Argentina, como el presidente de Shell Argentina, Sean Rooney; el Country Manager de ExxonMobil, Daniel De Nigris; y el vicepresidene de Operaciones Upstream de Pan American Energy, Juan Martín Bulgheroni, el vicepresidente de Upstream de YPF, Pablo Bizzotto.
"El crecimiento de Vaca Muerta no debe ser solo competitivo, sino también previsible, y los cambios que hemos visto a las reglas y condiciones económicas son dañosos para la credibilidad de las condiciones futuras", expresó el presidente de Shell en uno de los paneles en que se analizaron las condiciones necesarias para el desarrollo del sector en los próximos años.
A partir de las primeras versiones de posibles políticas que adoptaría el próximo gobierno para la industria, Rooney consideró que ante un consenso inequívoco sobre la importancia de Vaca Muerta,"las propuestas de ley o reglas que vienen son importantes para construir la confianza en la previsibilidad de las condiciones económica futuras, y facilitan las inversiones de miles de millones de dolares".
En similar sentido, el ejecutivo de la estadounidense ExxonMobil planteó que la industria requiere de "principios bastante fundamentales de mantener en el tiempo que van a permitir ser competitivos" frente a otros desarrollos en el mundo que buscan atraer los mismos capitales de inversión.
De Nigris enumeró la importancia de contar con "la previsibilidad de un marco regulatorio estable, la visibilidad de largo plazo de precios que tengan referencia de mercado, la posibilidad de libertad de los flujos de repatriación de dividendos a los inversores".
"La Argentina no establece las condiciones, y tiene que respetar las que utiliza el mercado internacional para ser competitivos y atraer las inversiones", agregó De Nigris al mencionar que contrario a cualquier idea de pesificación de precios los Estados "tiene mecanismos que pueden amortiguar los vaivenes del tipo de cambio y de los precios de los commodities".
A su turno, Bulgheroni planteó que "producir para exportar tiene que ser el paradigma de la industria en la Argentina", lo que requiere "juntar a la partes para proyectos de muy largo plazo que permitan desarrollar compromisos de compradores y de mercados a 20 años".
"Como industria es necesario tener certezas de largo plazo para ser competitivos con los Estados Unidos, donde existen beneficios fiscales que la Argentina tendrá que evaluar para alcanzar un tipo de competitividad similar en un marco regulatorio que promueva la exportación", agregó el vicepresidente de PAE.
En el mismo panel, Gabriela Aguilar, country manager de Excelerate Energy, (la empresa que tiene en proyecto la producción de GNL en el país) dijo que la discusión sobre la normativa que requiere una industria sustentable de exportación"es simplemente una cuestión de hacer números y decidir qué es lo más eficiente para ganar competitividad en la Argentina".
Por eso, Aguilar entendió que "todo beneficio de normas que impulsen el desarrollo de la actividad que generen un mejor marco regulatorio jurídico-impositivo va a resultar favorable".
Por su parte, Bizzotto planteó la importancia de ganar competitividad en Vaca Muerta para seguir compitiendo "en el portfolio global de inversiones de las grandes empresas", muchas de la cuales ya están operando en el país".
En el caso de YPF, el directivo destacó que la compañía "hizo el esfuerzo de desrikear (disminuir el riesgo en la exploración) gracias al aporte de sus socios internacionales", y si bien consideró que "las condicione macro de mercado tienen influencia se le puede dar continuidad a esos desarrollos".