La petrolera holandesa Royal Dutch Shell ha puesto el ojo en el desarrollo del shale en México, y confirmó que se prepara para realizar inversiones en tecnología para potenciar la industria de los no convencionales.
El vicepresidente de negocios globales de Shell, Jeremy Bentham, le aseguró al diario mexicano El Economista que la petrolera tiene “una larga trayectoria de procesamiento y transporte de gas licuado en el mundo y, con el aumento en la demanda global de energéticos, analizaremos todas las oportunidades que estén a nuestro alcance. Esto incluye inversión para el desarrollo en México, donde los recursos son abundantes”.
Según las estimaciones Shell, el gas se convertirá en el combustible de mayor uso e irá desplazando al crudo y otros combustibles.
Por otro lado, la petrolera aseguró que evalúa participar en las fases siguientes de la Ronda Uno para la exploración y producción en el Golfo de México.
Si bien Shell abandonó el proceso de precalificación para licitar por los contratos de producción conjunta en aguas someras dentro de la primera fase de la Ronda Uno, el CEO de la petrolera en México, Alberto de la Fuente, aseguró que la compañía mantiene la evaluación de las condiciones de contratos de las fases siguientes. De esta manera, podría participar en las próximas licitaciones, en aguas profundas y recursos convencionales o no convencionales.
Con respecto a la caída de los precios internacionales de crudo, el director global de Proyectos y Tecnología de Shell, Harry Brekelmans, aseguró que no quitarán el interés de los inversionistas por los recursos mexicanos, ya que la firma realiza negocios con inversiones a largo plazo, en las que la fluctuación de los mercados no influye.
“No calculamos con base en el corto plazo, sino en el atractivo que ofrecen los recursos”, agregó Brekelmans, después de destacar las condiciones de eficiencia de México.