Royal Dutch Shell, la petrolera más grande de Europa, reportó sus ganancias anuales más bajas en al menos 13 años y prometió tomar más medidas para superar su mayor crisis en más de una década.
Shell, cuyos accionistas aprobaron la semana pasada la adquisición de su rival BG Group, dijo que sus ganancias cayeron un 87 por ciento en el 2015 en una tasa interanual a 1.940 millones de dólares, en línea con las estimaciones de los analistas.
"Shell adoptará más decisiones de impacto para superar la caída de los precios del petróleo, si las condiciones lo requirieran", advirtió el presidente ejecutivo de la compañía, Ben van Beurden, en un comunicado.
En el último año, la petrolera ha eliminado proyectos multimillonarios, incluyendo su controvertido programa de exploración en el Mar Ártico de Alaska, el yacimiento de gas de Bab en Abu Dabi y el proyecto de arenas petroleras de Carmon Creek en Canadá.
La ganancia ajustada por costo de suministro (CCS) excluyendo ítems identificados, su forma preferida de medición de utilidades, bajó un 44 por ciento en el cuarto trimestre a 1.830 millones de dólares.
El gasto de capital para todo el año de Shell fue de 28.900 millones de dólares, 8.400 millones de dólares menos que en el 2014. Se espera que el gasto de capital para el grupo Shell-BG llegue a 33.000 millones de dólares en el 2016, una reducción del 45 por ciento desde su gasto combinado.
Shell vendió 5.500 millones de dólares en activos en el 2015, dijo la compañía.