Durante la Conferencia Mundial del Gas, el presidente de Winteshall, Mario Mehren, enfatizó que las empresas internacionales tienen “interés por invertir” en el yacimiento de Vaca Muerta, segunda reserva mundial de gas y cuarta de petróleo no convencional.
En un encuentro mantenido con periodistas argentinos en París, el ejecutivo sostuvo que "si no se generan condiciones para que lleguen nuevos proveedores de equipos al mercado o se los sigue desalentando con aranceles de importación; si no se desarrolla la infraestructura necesaria, no habrá forma de hacerlo”, en alusión al desarrollo de la formación de Vaca Muerta.
En un artículo publicado por La Nación, Mehren destacó la reforma de la ley de hidrocarburos en 2014, así como la autorización al aumento del precio del gas (la empresa produce gas en Neuquén y ha invertido u$s400 millones en los últimos dos años), pero también mencionó que las trabas a las importaciones, los aranceles aduaneros y las consecuencias del cepo.
Las trabas elevan los costos operativos. Días atrás, en una entrevista con ArgentinaShale.com, el gobernador de Neuquén, Jorge Sapag, mencionaba la necesidad de reducir los costos de producción, que hoy en Argentina duplican a los de EEUU. Para Mehren, esas diferencias en Vaca Muerta, son aún mayores: "Eso hace que un pozo allí cueste tres veces más que uno similar en los Estados Unidos. Es una brecha de eficiencia muy importante, que sólo se puede achicar acelerando el ingreso de nuevos proveedores y haciendo las inversiones imprescindibles en infraestructura”.
También mencionó la prohibición de enviar utilidades a la casa matriz desde hace ya dos años, así como la gestión de pagos que necesita tiempo de gestión para que el Central autorice los dólares.
De todas maneras, el ejecutivo de Wintershall destacó que hay interés de los inversores en Vaca Muerta y se mostró confiado en que durante la próxima administración de gobierno, las trabas se irán resolviendo.