La petrolera estatal YPF analiza reducir sus gastos en un 11 por ciento con el objetivo de evitar una suba en su deuda.
Según informó la agencia Bloomberg, la compañía desembolsará 4.000 millones de dólares el año que viene. Un valor menor a los 4.500 millones de dólares que tenía previsto en el presupuesto 2016, y por debajo de los 6.000 millones que gastó los dos años anteriores.
Además, reducirá su dependencia de la emisión de bonos, disminuyendo las colocaciones a más de la mitad respecto a los 4.000 millones de dólares de este año, detalló Clarín.
La petrolera tiene una deuda en circulación por 7.600 millones de dólares y planea financiar las operaciones con su flujo de caja, con lo que recaude de la venta de activos que no forman parte de su core business, y la venta de bonos sólo para refinanciar los compromisos por 340 millones que enfrenta en 2017.