China probablemente duplique sus compras estratégicas de crudo el próximo año, ya que una de las mayores caídas de precios en la historia alienta a una racha compradora que podría ofrecer cierto respaldo a los golpeados mercados petroleros.
Pekín agregará entre 70 y 90 millones de barriles de crudo a tanques de almacenamiento en 2016 para elevar sus reservas estratégicas de petróleo (REP), según la mayoría de los cinco analistas consultados en un sondeo y datos recogidos por Reuters.
La cifra es equivalente a casi una quincena de importaciones chinas promedio y ayudaría a llevar las compras generales de crudo del país a niveles récord, desafiando a Estados Unidos como el mayor importador mundial de petróleo.
Cualquier indicio de nuevas compras para las reservas estratégicas chinas ofrecería un inusual respaldo a los precios del crudo, que se han reducido en más de la mitad desde 2014 por un aumento de la producción global.
La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) se reunía en Viena para discutir sobre su meta de producción.
"El próximo año, la acumulación de reservas jugará un papel mayor (en China) que este año", comentó Wendy Yong, de la consultora de energía FGE.
Investigadores de FGE, de la consultoría ICIS y del banco Barclays estimaron que China podría duplicar las importaciones para sus instalaciones de REP a entre 70 y 80 millones de barriles el próximo año, frente a entre 30 y 40 millones de barriles en 2015. Otros analistas dijeron que el volumen podría ser aún mayor.
Importaciones para REP de cerca de 90 millones de barriles llevarían las reservas a un total de más de 300 millones de barriles, más de la mitad de la meta del Gobierno de alcanzar los 550 millones de barriles en el 2020.