Las siete principales compañías petroleras y del gas privadas deben reducir su producción en más de un tercio de aquí a 2040 para mantener las emisiones de dióxido de carbono dentro de los objetivos del Acuerdo de París, afirmó una ONG que estudia el sector.
El acuerdo, firmado por Estados y que no vincula directamente a empresas privadas, fija un objetivo de calentamiento "considerablemente por debajo de dos grados" en comparación con la era preindustrial y, si fuera posible, de 1,5 grados.
Como las emisiones de CO2 contribuyen al calentamiento global, los científicos pueden calcular un "presupuesto de carbono" para diferentes contextos. Al ritmo mundial de emisiones actual, el "presupuesto" para una subida de 1,5 grados se agotará en 13 años y para 1,75 grados, en 24, subraya la ONG Carbon Tracker, radicada en Londres.
Para su estudio la ONG se basó en un escenario de la Agencia Internacional de la Energía (IEA), que predice un calentamiento dentro de los límites del acuerdo de París, y lo comparó con los datos disponibles sobre las emisiones predecibles generadas por los principales proyectos de ExxonMobil, Shell, Chevron, BP, Total, Eni y ConocoPhillips, en los ámbitos petrolero y del gas.
Para mantenerse en el "presupuesto de carbono" de este escenario, deberían reducir sus emisiones totales en un 40 por ciento y su producción en un 35 por ciento, concluye Carbon Tracker.
"Existe un tope de carbono que puede emitirse para un determinado nivel de calentamiento global, lo que implica que si queremos alcanzar un resultado, en términos del Acuerdo de París o de cualquier otro objetivo, la producción de combustibles fósiles tendrá que reducirse", aseguró Andrew Grant, de Carbon Tracker.
"Y aunque las compañías aseguran que apoyan el Acuerdo de París, prevén producir más petróleo, gas y carbón", estimó el analista.
Según el estudio, los recortes de producción varían en función de las empresas.
El gigante estadounidense ConocoPhillips es el que más debe recortar (85 por ciento en producción y emisiones), mientras que el angloholandés Shell sólo el 10 por ciento de la producción y el 15 por ciento de las emisiones.