Juan José Aranguren, presidente de Shell en Argentina, defendió la baja de importes del combustible y aseguró que durante mucho tiempo “las petroleras subsidiaron al consumidor, ahora los consumidores están subsidiando a la industria”.
Durante una entrevista con el diario Clarín, Aranguren explicó que si bien la baja del 5 por ciento de los precios fue una decisión correcta, no debe continuar bajando ya que puede afectar los niveles de actividad.
“En este acuerdo voluntario, los refinadores nos comprometimos a procesar la misma cantidad que veníamos procesando en 2014 y bajar los precios si los proveedores accedían”, dijo.
A este panorama se le sumó que el Gobierno Nacional disminuyó “en lo que podía los impuestos, el ITC y la tasa hídrica. Y bajó las retenciones, muy tarde porque históricamente les veníamos diciendo que era un error, pero se eliminaron en hora buena”.
Actualmente, el barril de crudo en Argentina se encuentra a US$77. Al ser preguntado acerca de la posibilidad de comprar petróleo afuera a un precio más accesible, el presidente de Shell aseguró que puede no resultar tan conveniente, ya que se correrían riesgos.
Según detalla Aranguren, traer un barril de África requiere de una autorización para importar y de la facilidad de comprar dólares. Al fallar o demorarse alguna de estas dos instancias, se podría generar desabastecimiento, por este motivo no lo considera conveniente.