El petróleo subía más de 1 dólar, respaldado por el optimismo sobre la vacunación contra el COVID-19, un paquete de estímulo en Estados Unidos y la creciente actividad manufacturera en Europa a pesar de las restricciones impuestas para frenar la propagación del coronavirus.
A las 0959 GMT, el crudo Brent subía 1,08 dólares, o un 1,7 por ciento, a 65,60 dólares por barril y el petróleo West Texas Intermediate (WTI) de Estados Unidos ganaba un 1,04 dólares, o un 1,7 por ciento, a 62,54 dólares por barril. Ambos contratos cerraron febrero con un alza de 18 por ciento.
El petróleo también recibía apoyo de la aprobación el sábado de un paquete de ayuda para el coronavirus de 1,9 billones de dólares en la Cámara de Representantes de Estados Unidos.
Si el Senado lo aprueba, el paquete de estímulo pagaría vacunas y suministros médicos y enviaría una nueva ronda de ayuda financiera de emergencia a hogares y pequeñas empresas, lo que tendrá un impacto directo en la demanda de energía.
La aprobación de la vacuna COVID-19 de Johnson & Johnson también mejoraba el panorama económico.
El crecimiento de la actividad fabril de China cayó a un mínimo de nueve meses en febrero, pero la actividad alemana alcanzó su mayor nivel en más de tres años, mejorando las perspectivas para la economía más grande de Europa.
La actividad fabril de la zona euro se aceleró en febrero gracias al aumento de la demanda.
La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus aliados, un grupo conocido como OPEP+, se reunirán el jueves y podrían discutir la posibilidad de permitir que hasta 1,5 millones de barriles de crudo por día regresen al mercado.