Sólidos datos económicos procedentes de China y Estados Unidos impulsaban al alza los precios del crudo, recuperando algunas pérdidas de la víspera, mientras la volatilidad causada por el coronavirus sigue dominando la escena.
El crudo Brent subía 88 centavos, o un 1,40 por ciento, a 63,02 dólares el barril, mientras que el West Texas Intermediate en Estados Unidos (WTI) avanzaba 89 centavos, o un 1,5 por ciento, a 59,54 dólares el barril.
Ambos contratos perdieron cerca de 3 dólares el lunes, presionados por el aumento del suministro petrolero de la OPEP+ y el alza de las infecciones de COVID-19 en India y partes de Europa.
El número mundial de muertes relacionadas con el coronavirus superó los 3 millones el martes, según un recuento de Reuters, en un momento en que el último resurgimiento de infecciones por COVID-19 desafía los esfuerzos de vacunación en todo el mundo.
La confianza del mercado se vio impulsada por datos de marzo que mostraron que la actividad de servicios en Estados Unidos tocó un nuevo récord. El sector servicios de China también mejoró, apuntándose el mayor aumento de ventas en tres meses.
No obstante, nuevas restricciones en la mayor parte de Europa y un aumento de los contagios en India presionaba a los precios.
Estos factores ayudaban a contrarrestar las preocupaciones por el acuerdo alcanzado la semana pasada por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus aliados, un grupo conocido como OPEP+, para aumentar en 350.000 barriles por día (bpd) el suministro en mayo, 350.000 más en junio y unos 400.000 barriles diarios en julio.