Decenas de buques cisterna con crudo que aún no ha sido vendido se han estado acumulando en el mar en las últimas semanas, una situación que recuerda a la crisis del 2015, cuando la recuperación de los precios del petróleo fue aplastada por el incremento de los suministros físicos.
Los futuros del petróleo han ganado un 75 por ciento en lo que va de este año, alcanzando el mayor nivel del 2016 por encima de 47 dólares el barril, gracias la percepción de que el exceso global de suministros se está disipando luego de casi dos años.
Los inversores han inyectado fondos al mercado petrolero a su ritmo más veloz en la historia, según datos bursátiles, y poseen un volumen récord de futuros del crudo Brent. Pero el mercado físico está enviando señales de alarma, ya que podría generarse un corriente liquidadora de petróleo similar a la que ocurrió en la primavera boreal del año pasado.
"Vemos un parecido preocupante con lo ocurrido en el 2015, cuando los precios del barril subieron con fuerza hasta bien entrado mayo antes de hundirse en el segundo semestre del año", dijeron analistas de Commerzbank en una nota.
Incluso pese a que los precios del petróleo han escalado, los inventarios de crudo de Estados Unidos alcanzaron máximos históricos y los cargamentos no vendidos permanecen frente a las costas de África Occidental y en el Mar del Norte.
"En vista de que tenemos niveles récord, esto puede ser atemorizante", dijo un operador.
Buques cisterna que contienen hasta 7 millones de barriles de Forties -uno de los grados que determinan el nivel del referencial global Brent- se han acumulado en el Mar del Norte durante este mes.
El volumen es equivalente a la mitad de la totalidad de cargamentos de Forties programados para mayo y datos de embarques marítimos de Reuters no muestran reservas de supertanqueros para transportar crudo a Asia en abril.
En Nigeria, poco menos de 10 millones de barriles aún no han sido vendidos y tienen previsto ser embarcados en mayo, de un total cercano a 50 millones de barriles de crudo.