Apenas una hora después de que el Gobierno Federal de EEUU publicara las nuevas regulaciones que afectan a los productores de petróleo de esquisto, la Asociación Independiente de Petróleo de América junto a la WesternEnergy Alliance, presentaron una demanda en contra de las medidas anunciadas.
Es que las regulaciones que el gobierno de Obama implementó se superponen con las regulaciones de los Estados donde las técnicas de fracking se emplean desde hace años.
El 27 de marzo, EEUU emitió una serie de regulaciones que afectan a los productores de petróleo y gas de esquisto que tienen sus perforaciones en campos fiscale (ver El gobierno de Obama...). Las medidas anunciadas no hacen más que generar burocracia y mayores costos para los productores independientes, pequeños y medianos que fueron los verdaderos protagonistas de la revolución del fracking en los últimos 10 años.
Desde varios sectores se criticaron las medidas del gobierno, que fueron lanzadas un día después de los anuncios de Obama sobre el compromiso de EEUU en la reducción de la emisión de gases de efecto invernadero, parte del compromiso en la "agenda verde" que quiere marcar el presidente norteamericano.
Desde la Asociación Independiente de Petróleo han calificado de "infundadas y sin sustento científico" los cuestionamientos ambientales a la práctica de la fracturación hidráulica. Días pasados, el presidente del Departamento de Ciencias Terrestres y Planetarias de la Universidad de Harvard, John Shaw, aclaró ciertos mitos sobre el fracking que desmiente la posición de algunos sectores medioambientales.
"La fracturación hidráulica se ha llevado a cabo de forma segura y responsable en los Estados Unidos por más de sesenta años," dijo en un comunicado el presidente de la IPAA, Barry Russell; "estas regulaciones le agregarán nuevos costos a nuestros productores independientes, y alejan las inversiones de los generadores de energía de EEUU, la creación de empleo, que tanto se necesita, y el crecimiento económico", agregó
Desde los sectores de izquierda, que exigen una "agenda verde" más agresiva, también expresaron su descontento con las regulaciones, ya que las consideraron escasas, puesto que exigen la prohibición del fracking en los terrenos estatales, que alcanza a unos 100.000 pozos productores.
El Senado de EEUU, dominado por los republicanos ya anunció la presentación de un proyecto de ley que dejará sin efecto estas regulaciones.
El columnista Stepeh Ewart (@stephen_ewart), del Calgary Herald, explica que estas regulaciones federales avanzan sobre las regulaciones de cada Estado, y plantea que si estas regulaciones son los suficientemente importantes para ser aplicadas en tierras del Estado, por qué no podría implementarlas en otras áreas?