Goldman Sachs elevó sus previsiones sobre el precio del crudo Brent, proyectando 86 dólares el barril para la segunda mitad de 2024, frente a los 85 dólares anteriores, y 82 dólares para 2025, comparado con los 80 dólares previos.
"Seguimos viendo valor en las posiciones largas en petróleo ante los importantes beneficios de cobertura de la cartera frente a las perturbaciones geopolíticas, y una atractiva rentabilidad anualizada del 10%", dijo Goldman en una nota.
Por otra parte, Commerzbank elevó su previsión de precios para el Brent hasta los 90 dólares por barril para fines del segundo trimestre, con un nivel de precios de 90-95 dólares previsto para la segunda mitad de 2024, 5 dólares por encima de la previsión anterior.
Además de las tensiones geopolíticas, las perspectivas de aumento de la demanda petrolero en la segunda mitad del año y la contención de la oferta de la OPEP+ hasta mediados de año refuerzan esta previsión.
"Para la segunda mitad del año, cabe esperar, en el mejor de los casos, una reversión gradual de los recortes voluntarios de la producción por parte de la OPEP+", afirmó Commerzbank.
Los miembros de la OPEP+, encabezados por Arabia Saudita y Rusia, acordaron en marzo prorrogar los recortes voluntarios de producción de 2,2 millones de barriles diarios (bpd) hasta fines de junio para sostener el mercado. La OPEP+ se reunirá en junio para decidir si amplía aún más las reducciones al bombeo o devuelve parte de la oferta al mercado.
Un tira y afloja entre la tensa geopolítica y los fundamentos más laxos probablemente mantendría los precios del Brent entre unos 85-95 dólares por barril, salvo sorpresas geopolíticas importantes, añadió Citi en una nota.
Los precios del crudo se dispararon el viernes, tras conocerse que Israel había lanzado un ataque contra Irán, antes de retroceder cuando los temores del mercado a una escalada mayor de las hostilidades en Oriente Medio parecieron remitir.