El crecimiento de la demanda mundial de petróleo está perdiendo impulso, dijo la Agencia Internacional de Energía (IEA), al recortar su previsión de crecimiento para 2024, en marcado contraste con las proyecciones del grupo productor OPEP.
La agencia, que agrupa a países industrializados, ha pronosticado que la demanda de petróleo alcanzará su punto máximo en 2030, a medida que el mundo cambie hacia energías más limpias, mientras que la OPEP prevé que el consumo de crudo siga aumentando durante las próximas dos décadas.
Esta semana, los informes mensuales de ambos organismos han puesto de relieve las marcadas diferencias entre sus previsiones de demanda de petróleo para 2024.
El ritmo de expansión se desacelerará a 1,22 millones de barriles por día (bpd) en 2024, aproximadamente la mitad del crecimiento registrado el año pasado, en parte debido a una fuerte desaceleración del consumo chino, dijo la agencia.
Anteriormente había previsto para 2024 un crecimiento de la demanda de 1,24 millones de bpd.
"La fase expansiva de crecimiento pospandémico de la demanda mundial de petróleo ha llegado a su fin", dijo la IEA, añadiendo que un clima macroeconómico mundial más duro también es probable que limite el crecimiento este año.
El crudo de referencia Brent ha subido cerca de un 6% desde principios de año, ya que los ataques a la navegación en el mar Rojo han aumentado los temores sobre el suministro, a lo que se suman las interrupciones de enero en los principales países productores de petróleo no pertenecientes a la OPEP, como Estados Unidos.
Sin embargo, las alzas se han visto limitadas por las preocupaciones sobre la demanda, ya que las principales economías siguen lidiando con tipos de interés elevados para frenar la inflación.
Por el lado de la oferta, la IEA elevó su previsión para 2024, estimando que la oferta crecerá en 1,7 millones de bpd frente a su anterior previsión de 1,5 millones de bpd. La agencia citó el suministro de productores ajenos a la OPEP y aliados que conforman el grupo más amplio de productores OPEP+.
La IEA espera ahora que la oferta aumente hasta un nivel récord de unos 103,8 millones de bpd, impulsada casi en su totalidad por productores ajenos a la OPEP+, como Estados Unidos, Brasil y Guyana.
Dadas las sólidas perspectivas de la oferta fuera de la OPEP+, la IEA prevé una ligera acumulación de inventarios en el primer trimestre.
Según la IEA, la producción de crudo de los 22 países miembros de la OPEP+ descendió en enero 330.000 bpd, a 41,52 millones de bpd, después de que protestas paralizaron la producción libia y de que algunos miembros del bloque ampliaron recortes de bombeo, aunque no tanto como se habían comprometido.