Los precios del Brent podrían terminar el año en 96 dólares por barril, dijeron analistas de J.P. Morgan, añadiendo que ven los recortes sorpresa del objetivo de suministro de la OPEP como una "medida preventiva" para asegurar que los excedentes del mercado petrolero no se extiendan hasta la segunda mitad de 2023.
Arabia Saudita y otros países de la Organización de Países Exportadores de Petróleo anunciaron nuevos recortes de la producción de unos 1,16 millones de barriles por día, una medida sorpresa que disparó los precios y que Estados Unidos calificó como "desaconsejable".
El compromiso eleva el volumen total de recortes de la OPEP+ a 3,66 millones de bpd, según cálculos de Reuters, lo que equivale al 3,7% de la demanda mundial.
La decisión del domingo se dio antes de una reunión virtual de un panel ministerial de la OPEP+, que incluye a Arabia Saudita y Rusia, y que se esperaba que mantuviera el plan de producción existente.
J.P. Morgan señaló además que había dado por hecho que tanto el Gobierno de Estados Unidos como el grupo de productores actuarían en el primer trimestre.
"Lo más sorprendente del anuncio es que no se haya hecho antes", señalaron los analistas de J.P. Morgan en una nota fechada el 2 de abril, y añadieron que "actuar más tarde disminuye el impacto sobre los balances globales y, por tanto, se tarda más en que el impacto sobre los precios se haga notar".
Sin embargo, Barclays dijo que ve un alza de 5 dólares en su previsión de precio del barril de Brent de 92 dólares este año tras los recortes de la OPEP+.
Anteriormente, Goldman Sachs también elevó su previsión de precios del Brent para diciembre de 2023 en 5 dólares a 95 dólares por barril, y la de diciembre de 2024 en 3 dólares a 100 dólares por barril.