Un total de 26 campos terrestres se abren para el capital petrolero privado en México, luego de que la Comisión Nacional de Hidrocarburos anunciara la apertura de la primera licitación para empresas privadas que explotarán campos terrestres, ya que hasta el momento, las dos licitaciones previas fueron para yacimientos en el Golfo de México.
Se trata de 17 campos de petróleo y 9 de gas, distribuidos en cinco estados: Chiapas, Nuevo León, Tabasco, Tamaulipas y Veracruz. La estimación oficial calcula un potencial de 2.500 millones de barriles de petróleo. Algunos pozos están maduros y necesitan de una inyección de capitales que motorice la producción.
PEMEX fue el monopolio de producción de petróleo para México, y tras una enorme resistencia y fuertes debates, en 2013 se desreguló parcialmente el mercado de petróleo mexicano para convocar al sector privado.
La firma estatal afronta grandes problemas (ver Los grandes problemas de PEMEX) y la apuesta por abrir las inversiones al sector privado genera un importante cambio de participaciones y nuevas oportunidades para la industria.
La licitación abierta para estos campos terrestres está orientada a los capitales mexicanos, aunque Juan carlos Zepeda, presidente de la Comisión Nacional de Hidrocarburos aclaró que las licencias están abiertas a todos los interesados que cumplan los requisitos, publica el diario El País.
Compañías como Shell, Exxon Mobil, Total, petrobras, British Petroleum y Ecopetrol están interesadas en operar y producir en México. En el mercado interno, grandes magnates como Carlos Slim y Alberto Balliéres ya han puesto en marcha empresas orientadas al sector energético, aunque ninguno de ellos tiene el conocimiento y experiencia de las firmas privadas que operan en el mercado.
El resultado de la licitación se conocerá el 15 de diciembre de 2015.