Es muy improbable que la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) reduzca su producción en la próxima reunión del cártel en junio, incluso si los precios permanecen extremadamente bajos, según fuentes y delegados del grupo, pues será demasiado pronto para decir qué tan rápido se eleva el bombeo iraní.
Las fuentes, entre las que figuran funcionarios de Oriente Medio, sostienen que países de la OPEP como Arabia Saudita también quieren probar el compromiso de Rusia de congelar la producción antes de tomar cualquier otra medida para estabilizar los precios.
Más de 18 meses después de que los precios del crudo comenzaron a caer con fuerza debido a una sobreoferta, Arabia Saudita, Qatar, Venezuela y Rusia, que no pertenece a la OPEP, acordaron el mes pasado congelar la producción a los niveles de enero, en el primer pacto petrolero global en 15 años.
El ministro del Petróleo de Arabia Saudita, Ali al-Naimi, dijo la semana pasada que no estaba contemplado un recorte de suministro, aunque añadió que el congelamiento de la producción era sólo el primer paso para equilibrar al mercado después de que los precios cayeron a su nivel más bajo desde 2003.
"Quizás a fin de año (sea posible un recorte) cuando esté realmente claro que Irán está produciendo los volúmenes de los que están hablando. Pero no en junio", comentó una fuente de los productores de la OPEP de Oriente Medio.
Enero fue un mes de producción máxima o casi récord para Rusia y Arabia Saudita, los dos principales exportadores de petróleo del mundo, pero Irán, el tercer mayor productor de la OPEP, es la principal incertidumbre sobre el suministro para 2016 debido a que está elevando su bombeo tras el levantamiento de sanciones occidentales en enero.
Omán, que no pertenece a la OPEP, y algunas fuentes del cártel han planteado la idea de que Irán quede exento de congelamientos a la producción, como sucedió con Irak en el pasado cuando el país fue objeto de sanciones internacionales, pero hasta ahora no se le han ofrecido términos especiales a Teherán, según fuentes de la OPEP.
El ministro del Petróleo de Irán, Bijan Zanganeh, indicó la semana pasada que un congelamiento de la producción era "risible", mientras que fuentes iraníes afirman que el país estaría preparado para discutir un pacto sobre producción una vez que su bombeo alcance los niveles previos a las sanciones.
Analistas creen que la producción y las exportaciones de Irán podrían subir en un máximo de 0,7 millones de barriles por día, a cerca de 3,5 millones, en los próximos meses, pero tomará tiempo entender cuáles son las cifras reales.