El grupo de productores petroleros, conformado por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y aliados liderados por Rusia, podría extender los recortes de bombeo después del mes de junio -cuando tendrá su próxima reunión- para apuntalar los precios y la demanda afectados por la pandemia del COVID-19, aseguraron múltiples fuentes a la agencia Reuters.
La demanda mundial de crudo ha caído 30 por ciento por el efecto de las medidas para combatir el coronavirus en los viajes y la actividad económica, con aumentos en los inventarios en el mundo. El Brent perdió un 65.6 por ciento en el primer trimestre, antes de que la OPEP y los productores encabezados por Rusia decidieran profundizar los recortes.
La OPEP+ había anunciado en abril una disminución del bombeo de 9.7 millones de barriles de petróleo diarios para mayo y junio, una reducción récord. Si bien los exportadores aliviarán lentamente las restricciones después de junio, los analistas del sector prevén que la oferta seguirá reducida hasta abril de 2022.
La alianza se reunirá a principios de junio para decidir sobre su política de producción. Según el acuerdo, el grupo exportador podría reducir los recortes a 7.7 millones de barriles diarios de julio a diciembre.
"Los ministros quieren mantener los mismos recortes en la producción de petróleo de ahora, que son de alrededor de 10 millones de barriles diarios, después de junio. No quieren reducir el tamaño de los recortes. Ese es el escenario base que se está discutiendo ahora", dijo una fuente de la OPEP+ a Reuters.
Por su parte, una fuente de Rusia no descartó que se renueven los recortes existentes más allá de junio, pero agregó que "dependerá de la situación del mercado".