La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus aliados, incluida Rusia, se inclinan por retrasar un incremento en su bombeo en 2021 para apoyar al mercado en medio de la segunda ola de COVID-19 y un aumento de la producción petrolera libia, pese al alza en los precios, dijeron fuentes cercanas a la alianza.
El grupo compuesto por la OPEP y exportadores encabezados por Rusia debía elevar la producción en 2 millones de barriles por día en enero -un 2 por ciento del consumo mundial- como parte de una reducción de los recortes récord al bombeo aplicados en 2020.
Ante la caída de la demanda, OPEP+ ha estado considerando retrasar el aumento de su producción.
Es probable que Rusia acuerde una renovación de las cuotas actuales para el primer trimestre si es necesario, dijo una fuente familiarizada con el tema. Moscú preferiría decidir más adelante extenderlo para el segundo trimestre.
“Parece que se necesita la extensión”, comentó la fuente, citando “posibles caídas de precios e incertidumbres en la demanda” en medio de la segunda ola del virus.
La semana pasada, el crudo llegó a los 49 dólares por barril, su máximo desde marzo, por la esperanza de que las vacunas contra el coronavirus generen una mayor demanda. Eso no ha cambiado el pensamiento de la OPEP+ sobre la extensión, dijeron los delegados.