Con el comienzo del mes de noviembre llegaron nuevamente los aumentos en los precios de los combustibles. La primera petrolera en aplicarlo fue Axion, y le siguió Shell.
De esta manera, la nafta súper de Axion subió un 5 por ciento; el diésel, un 7 por ciento; la nafta premium, un 3,6 por ciento y el diésel premium, 4,1 por ciento. Mientras que Shell anunció un incremento promedio de 4,8 por ciento.
Según detalló Clarín, las compañías decidieron implementar un aumento mayor en sus naftas súper debido a la migración de los consumidores de nafta premium. De hecho, en el mes de septiembre se registró una caída interanual del 27,50 por ciento del consumo de las naftas más caras.
En lo que va del año, los combustibles llevan acumulados un aumento superior al 65 por ciento promedio. Por su parte, las petroleras habían adelantado que aún no se habían equiparado los valores internacionales.