Ante la incertidumbre que genera el cambio de gobierno y qué cambios podría realizar el nuevo presidente en el mercado petrolero en 2016, los petroleros argentinos decidieron crear una mesa de crudo.
Se trata de un grupo selecto entre los que se encuentran los principales jugadores del mercado: la petrolera estatal YPF, Pan American Energy (PAE), representantes del Ministerio de Economía y de las principales petroleras provinciales. Estos buscarán delinear un esquema de precios para el 2016, y acercarle su propuesta al ganador de las próximas elecciones presidenciales.
Según detalló El Inversor Online, el precio de los combustibles estará vinculado en primer lugar a la evolución del tipo de cambio. Esto se debe a que economistas estiman que el próximo gobierno podría devaluar la moneda estadounidense por encima de los 11 dólares, y los precios del mercado deberían ajustarse a esta medida.
En segundo lugar, otro de los factores es el precio internacional del crudo. El Gobierno argentino acordó a fines del año pasado con las compañías y los gremios subsidiar a los productores de petróleo manteniendo un precio competitivo más alto que el internacional (77 dólares el barril) para proteger la inversión.
El presidente y CEO de YPF, Miguel Galuccio, aseguró a principios de septiembre que “tendremos que ir viendo cómo encontrar un precio justo para el mercado local. Y en ese sentido, no es lo mismo si el precio internacional es de 40 dólares que si trepa hasta los 60”.