La producción de petróleo de Estados Unidos aumentó en 94.000 barriles por día en julio, a 9,358 millones de barriles diarios, pese a que el bombeo en estados productores de esquisto declinó.
Los productores del Golfo de México añadieron 147.000 barriles de crudo por día, mientras que los de esquisto en Dakota del Norte, Texas y Oklahoma recortaron la producción, de acuerdo a información mensual de la gubernamental Administración de Información de Energía (EIA, por su sigla en inglés).
La producción de esquisto, que es más fácil de detener en medio de las condiciones bajistas del mercado, ha disminuido en un momento en que los precios del crudo cotizan a la mitad que un año atrás.
La producción mar adentro en el Golfo de México se mantiene, impulsada en gran parte por importantes inversiones llevadas a cabo antes de la caída de los precios del petróleo durante el último año.
"Se esperaba que la producción en el Golfo de México continuara creciendo", dijo Eric Lee, analista con el Citi en Nueva York. "Este año y el próximo tendremos aún un aumento de la producción de 250.000 barriles diarios de crudo", agregó.
El Citi espera que la producción general disminuya para fines del 2015, debido al cierre de pozos y una menor producción de esquisto.
La producción subió hasta los 9,612 millones de barriles diarios en abril y declinó en mayo y junio, dijo la EIA. Los productores estadounidenses agregaron 36 pozos en julio, según información de Baker Hughes.
El crudo estadounidense cayó más de 10 dólares por barril durante julio, y el retroceso continuó en agosto y septiembre.