Tras una nueva caída de los precios internacionales del crudo que la llevó a su nivel más bajo desde el 2009, los productores de shale oil analizan la producción ante un nuevo panorama.
Según estableció un informe de Bloomberg, algunas de las zonas productoras de petróleo de esquisto de Bakken, en Dakota del Norte, son rentables a menos de 30 dólares el barril de crudo, debido a que las compañías están aprovechando los pozos de mayor tamaño y se benefician con costos de perforación menores.
Este es uno de los principales motivos por el que Estados Unidos ha logrado mantener su producción a pesar del desplome de los precios del crudo del último año, indicó Energía 16.
“Una de las explicaciones de por qué no se ha reducido la producción es porque el costo ha bajado muchísimo”, señaló David Hackett, presidente de Stillwater Associates. “El costo marginal de producir se ha reducido drásticamente con la caída de los precios. Los perforadores eficientes son capaces de continuar ahora”, agregó.
Durante la crisis de precios, la producción de Bakken cayó menos de un 2 por ciento desde su máximo de diciembre del 2014, aunque el número de equipos de perforación descendió un 60 por ciento.
El punto de equilibrio de los precios puede variar en las diferentes áreas dependiendo de la eficiencia de la compañía operadora. En el Condado de McKenzie, donde se encuentra la cuenca de Bakken, el punto de “breakeven” habría alcanzado una media de 29 dólares el barril, según detalló William Foiles, analista de Bloomberg Intelligence.
Los pozos ubicados en este Condado han sido los que mejor rendimiento han tenido durante la caída de los precios, y es la zona con mayor actividad, con un total de 26 pozos horizontales activos.