Venezuela se encuentra actualmente negociando con Nigeria, Angola y Argelia una estrategia para defender su cuota de mercado y los precios del crudo frente a la crisis.
Según detalló Energía 16, las negociaciones se basan en la intención de Venezuela de importar crudo ligero de Nigeria, Angola y Argelia entre 2016 y 2017, cuando la Faja del Orinoco registre un importante crecimiento de la producción de crudo pesado gracias a los nuevos proyectos en desarrollo en el área.
Se estima que la producción de la región pasará de los 1,4 millones de barriles diarios a los 2,3 millones en 2017. El presidente de la petrolera venezolana PDVSA, Eulogio del Pino, explicó que debido al escenario de precios actual, “tendrá más sentido económico importar crudo liviano para mezclarlo con el crudo extra pesado, que producirlo en el país”.
Las negociaciones también contemplan la posibilidad de crear asociaciones mixtas con los países productores de crudo liviano.
Esta decisión fue tomada después de que PDVSA realizara un proyecto piloto con la importación de crudo liviano de hasta 4 millones de barriles del norte de África en 2014.