Venezuela exportó alrededor de 388.100 barriles por día de crudo y combustible en julio, casi sin cambios con respecto al mes anterior, ya que las sanciones de Estados Unidos a PDVSA continuaron limitando las ventas, según Refinitiv Eikon y datos internos de la compañía estatal venezolana.
Washington ha aumentado la presión este año sobre los clientes, socios comerciales y transportistas de PDVSA con el objetivo de detener la reventa del petróleo venezolano y bloquear los intentos de ocultar o cambiar su país de origen.
Eso está haciendo que cada vez sea más difícil para muchos de los clientes de la compañía venezolana encontrar tanqueros para transportar el petróleo.
Un total de 20 cargas de crudo y productos refinados fueron enviados el mes pasado desde el país miembro de la OPEP, con India emergiendo nuevamente como el principal destino, con un tercio de las exportaciones totales, según los datos.
A principios de julio, la india Reliance Industries reanudó las importaciones de crudo venezolano después de una pausa de tres meses causada por las sanciones de Estados Unidos.
La compañía solicitó permiso al Departamento del Tesoro de los Estados Unidos para cambiar petróleo venezolano por diésel.
Pero la recuperación de las exportaciones a la India no fue suficiente para compensar la pérdida de otros clientes del petróleo venezolano en los últimos meses, dejando las exportaciones de julio un 1,8% por encima del mes anterior, pero un 60% por debajo del promedio de julio de 2019.
Venezuela también exportó 88.065 barriles diarios a Europa y 85.260 barriles por día a Cuba, según los datos.
Las importaciones de combustible que llegan a la nación sudamericana, cuya lucha por satisfacer su demanda interna de gasolina han aumentado nuevamente en los últimos meses, cayeron a 19.000 de 63.600 barriles diarios en junio.